Las actividades en el agua, de forma regular, constituyen una gran fuente de salud a cualquier edad. La mayoría de centros deportivos tienen una gran oferta de ellas, pero ahora, en pleno verano, también podemos disfrutarlas en la playa, al aire libre.
Las actividades acuáticas son una gran alternativa para aquellos que no disfrutan corriendo o en clases dirigidas con un alto nivel de exigencia. Además, son las más recomendadas para aliviar los dolores de espalda, porque al practicarlas no producimos ningún impacto sobre la estructura de nuestra columna.
El agua hace flotar el cuerpo, permitiendo que éste desprenda el estrés y la tensión acumulada en las articulaciones del mismo.
Por eso, actividades como el aquagym, por ejemplo, son altamente recomendadas para personas mayores, pero también para embarazadas o personas con sobrepeso o problemas lumbares.
Por qué practicar un deporte acuático
- Se queman más calorías que en otros deportes debido a la resistencia del agua.
- Son altamente recomendables para reposicionar la columna y favorecen procesos de recuperación de dolencias o lesiones.
- Incrementamos la capacidad pulmonar y cardiorrespiratora y aumentamos la resistencia física.
- La sensación de esfuerzo es menor gracias al frescor del agua.
- Las articulaciones se desgastan menos que al practicar otras disciplinas ya que no reciben tanta presión.
- Ayuda a relajarnos y mejora el estado de ánimo y buen humor.
¿A qué estás esperando para iniciarte?
Disfrutar del aire libre, los rayos del sol y al mismo tiempo realizar deporte.
Éste es el secreto que seduce cada vez a más personas, y que hace aumentar, verano tras verano, la práctica de deportes acuáticos como el kitesurfing, el flyboard, el paddle surf o el esquí acuático.
Una ocasión única para disfrutar del mar como nunca antes habías hecho.